Centro de Investigaciones Jurídicas, Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales
UNIVERSIDAD CENTRAL DE CHILE
Aula Magna, Centro de Extensión Hugo Gálvez. Universidad Central.
8 y 9 de Enero, 2013
I. PRESENTACIÓN
Uno de los problemas más difundidos en las sociedades modernas, especialmente las latinoamericanas, es el reconocimiento a los derechos culturales de los pueblos originarios.
Las formas de enfrentar el problema del reconocimiento a los pueblos originarios en derecho oscilan entre quienes pretenden integrar al indígena a un cuerpo social con pretensiones de homogeneidad, pasando por otros que plantean un reconocimiento de derechos colectivos, pudiendo entonces fundamentarse la existencia de dos derechos penales paralelos: el uno para indígenas y el otro para no indígenas. Hasta algunos que solo reconocen como valioso lo que viene de concepciones indígenas, bajo cuyo alero podría entonces fundamentarse la existencia de tantos derechos penales como pueblos originarios existan.
La idea de sistemas penales paralelos no es extraña en nuestra historia, es así como el parlamento de Tapihue en 1825, reconoció como frontera el Bío Bío, denominando “el país” al nuevo estado nacional, y “la tierra” al sur del Bío Bío, donde ejercen jurisdicción las autoridades mapuche.
En nuestro país, el reconocimiento y ejercicio de derechos colectivos indígenas han sido paulatinamente incorporados en la legislación internacional, sin embargo en Chile hasta ahora el único instrumento legal expreso ha sido la ley 19.253, cuyo art. 54 reconoce la costumbre indígena como eximente o atenuante de responsabilidad penal, pero con efectos restringidos. Tampoco la reforma procesal penal consideró de manera real la diversidad de los pueblos originarios, existiendo solo una defensoría especializada para mapuche y facilitadores interculturales en algunas regiones. (I, XV, VIII y IX)
La jurisprudencia en algunas ocasiones ha otorgado un reconocimiento a la especificidad indígena usando herramientas de la dogmática jurídico penal, a nivel de culpabilidad (error de prohibición, fuerza irresistible). Existen otros planteamientos como el del error de comprensión culturalmente condicionado, cuyo efecto es excluir la culpabilidad cuando el sujeto por su cultura o sus costumbres no comprenda la criminalidad de su conducta, o no se le pueda exigir que adecue su conducta a esta comprensión. En otros casos no excluye la culpabilidad pudiendo solo atenuarla, solución que se observa en el anteproyecto del Código Penal boliviano.
Urge entonces indagar sobre la mejor forma en la que pueden hacerse efectivas las obligaciones internacionales contraídas por Chile en cuanto al reconocimiento penal de los pueblos originarios, si a través de un sistema penal distinto para indígenas, si mediante una reforma penal integral a la legislación nacional que se haga cargo de diversas situaciones que se pueden plantear en torno a la justicia comunitaria, de otros medios de intervención distintos al penal que tiendan a reconocer su forma de resolución de conflictos, o al tema de reconocimiento de sistemas penales indígenas, tomando como ejemplos las experiencias latinoamericanas (Colombia, México, Guatemala, Ecuador, Bolivia) y europeas cuando fuere pertinente.
También se hace necesario abordar la problemática de género e interculturalidad en sus aspectos penales a fin de esclarecer los derechos de la mujer indígena, considerada tanto en cuanto a su género como a su pertenencia a un pueblo originario.
El presente seminario es la actividad de cierra del proyecto Fondecyt Regular n°1110086 intitulado “Pluralismo cultural, pueblos originarios y derecho penal chileno: del derecho indiano a la administración biopolítica: bases para una reforma integral”
II. LUGAR Y FECHA:
Martes 8 y miércoles 9 de enero de 2013, en Aula Magna Centro de Extensión Hugo Gálvez Universidad Central de Chile.
Dirección: Lord Cochrane 418, Santiago.
Informaciones e inscripciones:jilataluisjimenez@gmail.com
Teléfonos: 25826376 – 25826348.
Actividad Gratuita.
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