Amnistía internacional y la ONU rechazaron la represión contra la comunicad mapuche en Chushamen, Chubut. En Argentina, organizaciones y políticos reclamaron la liberación de los detenidos. Y la iglesia exigió "el respeto por los derechos de los pueblos indígenas, consagrados por la Constitución Nacional y los tratados internacionales". Pérez Esquivel viajó con un equipo de notables.
Amnistía Internacional Argentina repudió la represión contra el pueblo mapuche Pu Lof del departamento Cushamen, de la provincia de Chubut, como respuesta a la negociación para que liberen las vías del expreso 'La Trochita', que por cierto había sido acordado.
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"La orden emitida no encuentra correlato con los hechos de la realidad. Amnistía Internacional condena la falta de un eficaz control judicial sobre los alcances y exabruptos que fueron cometidos en territorio. La opacidad, falta de transparencia y rendición de cuentas no pueden ser los principios que atraviesan los operativos policiales", indicó Mariela Belski, directora ejecutiva de Amnistía Internacional Argentina.
La organización internacional dijo que los hechos se produjeron "en un contexto de creciente criminalización de la protesta y particularmente de estigmatización del pueblo mapuche", que en dicha zona de la patagonia reclama sus tierras ancestrales al grupo empresarial Benetton.
Y la ONU también
En diciembre pasado, el Comité para la Eliminación de la Discriminación Racial (Comité CERD) de las Naciones Unidas difundió sus observaciones finales y destacó que los pueblos indígenas y los afrodescendientes enfrentan una discriminación estructural en la Argentina.
Y exigió la garantía de los derechos territoriales de las comunidades y la plena implementación de la Ley 26.160.
La preocupación de la iglesia
La Iglesia expresó su repudio a la represión al señalar: "El respeto por los derechos de los pueblos indígenas no se logrará criminalizando sus reclamos. Se deben encontrar vías pacíficas para solucionar los conflictos".
En un comunicado, el Equipo Nacional de Pastoral Aborigen (Endepa), un organismo eclesial católico al servicio de los pueblos indígenas, reclamó tanto al gobierno nacional como al chubutense "el respeto por los derechos de los pueblos indígenas, consagrados por la Constitución Nacional y los tratados internacionales" y criticó que se priorice "el interés de extranjeros por sobre el de los pueblos indígenas, preexistentes al Estado argentino".
Al afirmar que se da privilegios a extranjeros sin respetar derechos, concluyó: "No será fácil solucionar los múltiples reclamos que decenas de pueblos indígenas realizan hace tantos años, pero es el único camino que podrá proporcionar el respeto de los derechos en juego. La violencia y la represión estatal por otro lado, solo pueden generar más injusticia y menos paz social".
Otros repudios
Las organizaciones del Encuentro, Verdad y Memoria publicaron en un comunicado que tremina con una proclama: "Exigimos el cese de la represión y de la ocupación militar del territorio mapuche".
El Partido Justicialista (PJ) de Chubut enfrentado al Chubut Somos Todos (ChuSoTo) de Das Neves, emitió un comunicado respaldando a la comunidad Lof de Resistencia Cushamen.
Asimismo, desde el Frente para la Victoria (FpV) de San Carlos de Bariloche rechazaron los hechos, al señalar que este accionar del gobierno nacional "pone en evidencia, una vez más, la voluntad de instalar un modelo represivo de estado y el resguardo del macrismo hacia los grandes grupos económicos y en detrimento de los derechos colectivos".
Un equipo de abogados y hombres de los derechos humanos, encabezados por el Premio Nobel de la Paz Pérez Esquivel, viajó hacia la zona para proteger la vida y salud de los detenidos y heridos de gravedad que dejó la brutal represión.
Fuente: Diario Registrado
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